viernes, 17 de febrero de 2012

Amoríos platónicos que se aferran al corazón.

Con un hilo de voz, intento sostener mi cuerpo que se ve flaqueado de tantas emociones juntas. Tú siempre apareciendo cuando menos te espero, arrebatándome la razón por dos segundos… dos segundos en los que me dejo cautivar por tu sonrisa.

¿Sabes? Hay muchas cosas que me encantan de ti, pero lo que más me gusta de ti es que me encantas tú. Eres tan lindo, me provoca robarte tantos besos, dejarte anonadado, pero no puedo… debo retener mis impulsos, es lo único que detesto de ti: que no me perteneces.

Pero yo esperaré y perseveraré, no me rendiré. Te sonreiré siempre, tomaré tu mano, acariciaré tu palma y rascaré tu espalda sabiendo lo mucho que te gusta.

Quisiera decírtelo, ¿sabes? Es muy difícil callarme todo este embrollo en el que me metiste. Pero debo ser paciente.

Mientras, me recostaré en mis sentimientos, fijaré la vista en mis sueños y me escabulliré entre ellos, buscando tu sonrisa y tus ojos brillantes.

Ahora, me acercaré a ti con mi sonrisa más discreta, te saludaré y haré como si tu abrazo no significase más que un gesto cordial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿te has enamorado?