miércoles, 21 de diciembre de 2011

Mejilla.


La luz se fue. Risas, gritos, voces, y pánico. La piel se me erizaba y el sudor frío bajaba por mi espalda. Quería sujetarme a algo, pero no tenía nada. Luz, calma, la oscuridad se fue.

Y yo, dejando atrás ese momentáneo episodio de pánico, busqué con mis ojos un algo, o un alguien. Y te vi a ti. Me pregunté que qué hacías allí, más por curiosidad que por otra cosa. Me acerqué a ti, porque siempre me pareciste agradable. Un saludo, un intercambio de palabras, y sin haberlo visto venir, tus labios se estamparon en mi mejilla. ¿Por qué? ¿Por qué habrías de hacer eso? ¿Por qué siento un calor emanando de mis mejillas? ¿Por qué mis manos están inquietas?

Con un parpadeo, ya no estás en frente de mí. Te has ido, dejándome muchas dudas, y ninguna respuesta. Solo un beso en mi mejilla.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Amor imaginado.



Hola, sé que no me conoces, pero yo si te conozco a ti. Te miro todo el tiempo, esperando que me veas y nuestras miradas se crucen. Pero no es culpa mía mis ojos te buscan inconscientes, no lo pueden evitar. Cuando hablas con una chica la envidio inmensamente, desearía ser yo quien abrazas y con quien ríes, tener tan solo un minuto para decirte lo mucho que me gustas.
Se muchas cosas de ti, guardo fotos tuyas y las veo. No es que este loca por ti, pero me gusta ese suspiro que se me sale al verte, esa sensación cuando me hablan de ti, esa corriente que me recorre el cuerpo cuando se que estas cerca.
Quisiera, quisiera ser tu novia, que me tomes de la mano y decirte un puñado de cursilerías. Salir contigo al cine y besarte en los momentos aburridos de la película, ir a comer, tomar un helado, intercambiarlos y sentarnos a mirar la luna. Todo eso se me pasa por la cabeza cuando pienso en ti, cuando te veo, cuando escucho tu nombre. Y en lo tonta que estoy por ti, en lo mucho que me gustas, en las maneras de hacerte feliz si tan solo te dejaras, si tan solo se cruzaran nuestras miradas.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Tiempo corrupto.


– ¡Idiota! ¡¿Por qué eres así?! – no puedo perdonarme que ahora seas así.

– Es la única forma de solucionar los problemas, ¿o no? – no tengo otra salida, no me dejaste escapatoria.

– Pero, ¿por qué tú…? ¡¿Por qué no lo olvidas?! – ¿por qué no dejas de amarme y sufrir por mí?

– Porque es imposible, ya me adapté a este dolor. – y siendo honesta, a pesar de todo… me gusta mucho amarte.

– Eres tan soluble, ¡no puedes ser así! – no te aferres a esa infelicidad por mí… por favor…

– ¡Déjame! ¡Tú tienes la culpa de todo! Déjame hacer lo que desee al respecto. – déjame estar a tu lado, amarte en silencio, sin importar lo mucho que duela, callando mi dolor, secando mis lágrimas en la oscuridad, abrazándote en tus penas.

Y así se iban los segundos, en lágrimas transparentes, camufladas en enojo y maquillándose con indiferencia. Y así el tiempo corría, en gritos ahogando tanto deseo por amarse, en reclamos escondiendo la inquietud de ambos labios por rozarse.

Ella se aferró a un sentimiento que se la comía viva desde dentro. Él no soportaba verla tan herida, vulnerable, tan destruída.

Ella anhelaba abrazarle. Él buscaba besarla. Ellos… de diferentes formas, pero con intensidades iguales… se amaban. Ellos se amaban.

– Todo lo que hice… – fue porque te amé.

– Todo lo que hago… – es porque te amo.

–…es porque me importas. – y eso nunca cambió.

miércoles, 29 de junio de 2011

Destino.


Reconocer al amor de mi vida es fácil si eres tú. Porque cuando estoy contigo soy una buena persona, veo paz; no puedo esperar para abrazarte de nuevo, o para mirarte a los ojos, o para oler tu aroma a lluvia. Tocar tus brazos y sentir tu humedad era suficiente.
Un beso, un te amo, una canción dedicada, con eso era feliz. Solo contigo. Tu y yo, en un sofá viejo, respirando tu aliento mientra me besabas el cuello y me rodeabas la cintura con tus manos, y las mías mezclándose entre tu pelo. Mirar las estrellas contigo, como en una película, darte un regalo, estar entre tus brazos, cerrar los ojos y seguir viéndote. Enamorarme de ti sin conocerte, besarte sin saber tu nombre.

domingo, 29 de mayo de 2011

Remembranza.


¿Me extrañas? ¡¿Que?! ¿Es que no te ha quedado claro que si? Te extraño demasiado, extraño todo lo que hacíamos, todo lo que eramos, lo que no hicimos y lo que nunca llegamos a ser. Extraño hacer un picnic, extraño prometerte cosas, y hablarte y saber que sonreirías solo por escucharme. Dime, ¿porque estas con ella, y no conmigo? Nunca pensé que volverías. Pero regresé a tiempo, creo. Mucho antes. No, de lo contrario, estaríamos juntos. Oh. Dime, ¿eres feliz? ¿Feliz? No del todo. Me faltas tú. Hey... ¿me robarías un beso?  Quizás... habría de pensarlo un montón. No me gustaría ver como volteas la cara y... Hey, si te robo un beso ¿lo aceptarías? ... Tomaré eso como un sí. Pero... ¿porque sigues esperándome?  Dicen que la esperanza es lo ultimo que se pierde. Oh... ¿Me amas, igual que antes? Puede que no... amar conlleva muchas cosas involucradas... Pero... a todas estas... ¿me extrañas? Hey, eres mi primer amor. Tu eres el mio... y, hey, si ella no existiera... estaríamos juntos.

domingo, 22 de mayo de 2011

Besos nocturnos.


Fui tan traviesa, no debí escaparme de casa, no debí mentir y venir hasta acá. No podía ser tan malvada como para hacerle eso a mis padres... pero lo hice. Los nervios de estar aquí en contra de mi voluntad de mis padres, el peso en mi conciencia, el temblor en mis manos, todo eso se esfumó con tus labios.

¿Para qué mentir? Si con diez segundos de tus brazos quería besarte, pero tuve miedo. Y cometiste el peor error: besar mi mejilla. No debiste hacerlo, ni menos alejarme a aquella banca, ni permitir que me recostara en ti para ver las estrellas. ¡No debiste dejar que yo quisiera besarte! ¿Y qué hiciste al respecto? Me besaste. A plena luz de luna, me besaste. Sin dejarme hablar, me besaste. A favor de mi corazón, me besaste. Quitaste toda amargura de mi mente por tres segundos, y me besaste.

¿Por qué me hiciste sentir eso? ¿Por qué volviste a buscar mis labios? ¿Por qué tomabas mi mano y la apretabas? ¿Te gusta verme necesitada de ti? ¿Disfrutas que te busque y te roce la boca, con esta sed de tus besos tan repentina? ¿De dónde te nació provocarme que yo quiera apartarnos del mundo?

No respondas a nada, ¿sí? Solo... bésame. Quédate, bésame y tócame la espalda, justo como lo hiciste hace cinco segundos.

Reías, te gustaba, me buscabas, me sostenías fuerte y me hacías hacer lo mismo. Olías delicioso, ese aroma me tentaba a quedarme a tu lado y alejar a los terceros de tanto derroche.

Fui tan traviesa, no debí escaparme de casa, no debí mentir y venir hasta acá. No podía ser tan malvada como para hacerle eso a mis padres... pero lo hice, y cómo lo disfruté.

lunes, 25 de abril de 2011

Reencuentro.



Esos meses sin verte me parecieron años, porque te extraño desde aquel noviembre, cuando soñamos juntos a amarnos por siempre.
¿Vendrías? ¿Me acompañarías? Hey, ¿sabias que estarías conmigo? Disculpa mi paranoia. ¿Sentiste lo mismo que yo cuando te veía caminar hacia mi? Y cuando me abrazaste, idéntico a como lo hacías antes, ¿sentistes chispas dentro de ti? Un calor que te recorre desde los pies hasta la punta del pelo. Tenias el mismo perfume de siempre, ese que me encanta, ese que usabas cuando... Ah, tu sabes. En más de un momento pensé en hecharte los brazos al cuello y besarte hasta siempre, pero eso habría estado mal ¿no?
¿Te das cuenta de lo que daría por ti? ¿De que te amo? Porque si, te amo.¿Como puedo demostrártelo? Que me haces falta, que te extraño, que te necesito. Que si vuelves conmigo, no te dejare ir mas nunca, que te lo doy todo... Pero ya todo eso lo sabias... En cambio, yo no se muchas cosas... ¿Me amas?

viernes, 15 de abril de 2011

En aquel rincón apartado...



Debía irse, ya era tarde... Ya era hora. Ella lo miró a los ojos, esperanzada porque se quedara un segundo más, porque le dijera, una vez más, que todo estaría bien. El se puso de pie, deslizó su mano por su brazo, para llegar a un ultimo roce e irse... pero ella le tomó la mano con fuerza, reteniendolo para siempre, atándolo a sí, abrazándolo. Pero ya era hora, los sonidos inundarian el lugar, como una ola enorme que se cala hasta los huesos; la gente, los mirarían, con los ojos ciegos que todos tienen, esos ojos que solo ven hasta donde alcanza la vista. ¿No ven los arroyos y las montañas? ¿No ven la pasion y las caricias? ¿No sienten pena por su clandestinidad? Entonces ella lo miró de nuevo, con la esperanza de que el viera lo que ella veía, más allá de un rostro y un cuerpo. Entonces rogó internamente por un último beso, una última respiración, un último cerrar de ojos, una última caricia, una última palabra... por un último beso que él concedió a sus labios.

domingo, 10 de abril de 2011

Fuego



Cuando dices te amo, es por que de verdad lo sientes. Lo sentia, lo siento. No digas te amo nunca, si, de un dia para otro, puedes olvidarlo todo... No lo olvidé jamas, no reduci nada a simples cenizas. Mas que cenizas, siempre queda una llamita en algun rincon. Cada recuerdo de ti, lo guardaba con anhelo, con esperanza; cada lagrima, cada suspiro... ¿no significaron nada para ti? ¿no valieron la pena? ¿todo fue en vano? Amor, dicen que el amor es la fuerza mas poderosa. Fuego, dicen que el fuego arrasa con todo.
¿Intentaste destruir con fuego todo lo que construí amando? No lo lograste.
¿No te sentias volar conmigo? ¿como quemar el aliento que compartiamos? ¿como quemar las sensaciones? Los abrazos, los besos, las miradas... los recuerdos. No hay manera; ¿aprender a convivir con ellos? Talvez. ¿Revivirlos? Mejor... Apreciar, abrir los ojos, darte cuenta de quien te ama, y de quien aspira llegar a quererte, son acciones complicadas, pero correctas...

lunes, 4 de abril de 2011

Abrazos cálidos, mares congelados, recuerdos memorables.


Me dejo llevar por este mar, el agua es fría y agradable, las búrbujas me elevan, mis recuerdos me sumergen. Siento sueño, me gusta dormitar aquí, es tranquilo y silencioso. Escucho voces de la nada, risas a lo lejano, los destellos que aquellas sonrisas aperladas logran traspasar mis párpados. Aprendo a respirar sin aire, mis pulmones viven de mi melancolía.

Algo me sostiene, algo no me deja seguir. Una cálida mano llena el espacio entre mis dedos, escucho una voz que se me hace dulcemente familiar. Mi húmedo cuerpo es abrazado por una esencia la cual ya sentí antes muchas veces. ¿Es eso una petición de compañía? Hace mucho que alguien me pide algo. Me aferro a... ¿una persona? Mi cabeza se apoya en un hombro, mi espalda es acariciada tiernamente, ya no tengo tanto frío... me gusta este nuevo calor.

Susurros, mis oídos se embriagan de escurridizos susurros. Me hacen cosquillas, se siente bien. Logro abrir los ojos un poco, veo el mar que me arrastraba, bajo un poco la vista y me encuentro con una espalda. A mi costado hay un cuello, huele bien... Comienzo a enamorarme de este viril aroma. Mis manos toman su propia voluntad, acaricio esta ancha espalda que me pide algo de amor. Unos cálidos labios me rozan la mejilla, un débil beso me hace querer depender de momentos así.

Estoy tan enamorada como la primera vez que vi los ojos de esta persona, de él... Me está cuidando, me arrastra a su presente, me sostiene con ternura, me ama...

Más que amarlo, amo la frontera que ha forjado entre el frío de este mar y la calidez de su abrazo.

miércoles, 30 de marzo de 2011

Miradas desviadas.



Eres especial, ¿solo lo eres conmigo? Quizá seas así con todas. No me importa, me haces sentir especial. Haces cosas para mí, por mí; me llamas cariño, corazón, lindura. Una melodía especial llega a mis oídos… es… es un piano… noto algo mas… ¡son mis dedos los que tocan! Pero espera… aun siento algo más... Tus manos. Tus manos están sobre las mías, me guían. Tus brazos rodean los míos, es un disimulado y tierno abrazo. Nos miramos, volteamos el rostro por un poco de vergüenza. Me gusta. Hay un brillo extraño en tus ojos, lo niegas, no dejas de mirarme, te gusta. Tartamudeas, y lo niegas, pero soy yo quien escucha aquí. Te amo. ¿Te costaba tanto decirlo?

martes, 29 de marzo de 2011


Mira hacia atrás, una chica te espera.

Es el "te amo" más insignificante que te han gritado alguna vez, ¿no es así? ¿Quién es ella? No te importa. Sigues tu camino, sigues aquel resplendor que a cada instante se torna menos palpable. ¿Dónde está esa bella luz? Se esfumó. Te sientes solo, buscas algo, alguien... una esencia a felicidad. Quien siempre amaste se ha ido. ¿Dónde está la dueña de esa sonrisa tan hermosa? ¿La de los ojitos brillantes que siempre anhelaste poseer?

Y ahora, ¿qué harás? Miras a tu alrededor, no hay nadie... espera... ¿Y ella? Hay una chica, llorando, tan perdida y tímida como tú la has encontrado. ¿Has intentado tomar su mano? Está fría, su vista se mantiene distante.

- ¡Deja! - te gritó. Se aleja, te da la espalda, y sientes cómo tu alma se va quebrando. Pero volverá, confías que regresará a tí.

- Vuelve... - y bastó de tu leve susurro para que ella corriera hacia tí.

- ¿Me amas? - preguntó.

- No... - admitiste.

- Entonces ¿por qué habría de quedarme? - sollozó. ¿Qué le dirías? ¿Le mentirías para tenerla a tu lado? ¿Qué te hace no dejarla ir?

- Te necesito, aquí, conmigo. - ¿te creerá? Seca sus lágrimas, y los fragmentos que quedaron en ese húmedo sendero.

No la amas, pero la necesitas. Ella te ama, pero no te necesita. ¿Gustan ambos de ese amor tan sadomasoquista?

Por los tiempos perdidos y las palabras que no dije nunca...



Por los minutos que gastamos en besos desesperados; quizá fue allí cuando debí mostrarte mi corazón, y rogarte pedirte e implorarte que no te fueras nunca, dijera lo que dijera. Como odio no haberte mencionado nunca que le enseñaste a mi corazón una nueva forma de latir: con frenesí, con paz, y otra vez con frenesí y locura; que fuiste una razón para dejar de existir por inercia, y tener una razón con sentido y un poco sin sentido para respirar. ¡La necesidad de extrañarte, y saber que vendrás, es inaguantable, casi insoportable! ¿Las miradas desperdigadas en tus ojos no fueron suficientes para darte a entender que eres único y especial? Te amo. Te amo a ti, a lo que eres. Amo tus defectos, amo tu flacura, tus chistes, tu voz gruesa, tu risa. Amo los ojos café que alguna vez me miraron con ternura y ese cabello que se me hacia tan molesto e irresistible.
Lo mas fastidioso de todo es, que no importa la cantidad de cosas que te diga, no creerás ninguna de ellas, ni siquiera me devolverás una mirada, y jamas describirán mis sentimientos, pues fueron demasiados días inalcanzables y atormentadores monstruos que nos consumieron... Pero, ¿piensas que puede consumirse el primer amor?

sábado, 19 de marzo de 2011

Su corazón acelerado

Ultimamente ha estado feliz, ha estado... sonriendo. Su andar parecen pasos de bailarina, más grácil, hay armonía en ella... ¿Lo has notado tu también? Me parece que algo le pasa, no la había visto así nunca antes... Ella es una chica rara ¡hace unas semanas estaba deprimida! Ya no hay ojeras, su rostro esta radiante, su respiración es constante, es suave, es deliciosa. Parece que todo lo que hace lo hace con amor, incluso si se cae, me parece que se levanta con ganas. Tal vez ni siquiera ha notado que se ha caído... mas bien salta, brinca, corre ¡hay adrenalina en ella! ¿La causa? Já, allá va. La rodea con sus brazos y aspira el olor de su pelo ¿he visto un beso? Si, fue uno pequeño, fue delicado, la hace feliz. Que gracioso, lo suelta, y él va tras ella.

jueves, 17 de marzo de 2011

Felicidad, amor, tú.



Caía, veía un vacío... No sentía nada y... ¿Y? ¡Y ya basta de todo esto! Ya nada de esa tristeza absurda, ya nada de eso tiene sentido. Pero... ¡Si ya nada tiene sentido ahora! ¿Estoy en las nubes? Eso parece, me siento tan liviana... tan relajada... Es... es que me tomas de la mano, vuelo... Volamos. ¡Muero por verte! Porque no dejo de contar cada segundo para abrazarte de nuevo, y mirar al fondo de tus ojos... Solo encuentro verdad. Amor. En cada una de las palabras, en cada uno de los gestos; hay un amor demasiado hermoso para no creerlo. Rozas tu mano en mi mejilla, siento como una corriente eléctrica recorre todo mi cuerpo, desde los pies, hasta las yemas de mis dedos. Hacia tanto que nadie me hacia tan feliz, ahora soy feliz, por ti. Se que, al final del día, tú me esperas allí, con una sonrisa, y los brazos abiertos... Tal vez un pequeño beso, o quizá uno muy grande, pero estas allí, para devolverme una infinita felicidad, una que había perdido, que arrebataron de mis manos. Me la das a cambio de un solo pestañeo mio, un solo suspiro. Eso es todo, pero aun mas por demostrarte, aun quedan mas abrazos y mas palabras.

sábado, 12 de marzo de 2011

Sentimientos perdidos.


Yo quiero que este aqui. Quiero abrazarlo, y dedicarle canciones cursis, y decirle cuanto lo quiero. Eliminar todos los errores, comenzar de nuevo... ¡Si! Curar las heridas... Y decirle que es mi mundo, que nada me importa, solo él. Pero... supongo que ya es tarde. Ya se ha ido, no volverá. Que soy pésima demostrando lo que siento, soy pésima en muchas cosas... Ama a otra, yo no le intereso; no le importo... Que nunca diré lo que el quiere escuchar... ¡pero si dire todo lo que siento! Solo si pudiera decir, una vez más... pero es tarde... me he desgastado. Quiero amarlo... Quiero tocarle el pelo, y decirle que lo corte, porque lo tiene muy largo... No quiero que por ese cabello largo y feo pasen otras manos que no sean las mias... Y que de cualquier comentario me saque un doble sentido... Y su espalda... no quiero que otras manos la toquen: esa espalda es mia ¡que no se la toque! ¡Fui tan estupida! ¡tengo el corazon vacio! no siento nada... No puedo quitarme su olor de encima, estoy lista para llorar... No vuelve.. aun esta con ella. No me importa nada.

viernes, 11 de marzo de 2011

Esperanzas irreales.



Me aferré a ti; tú me diste fuerza para hacerlo con más empeño... para luego empujarme, soltarte y huir sin más. ¿Que sentido tenía? ¿Que ganabas con darme esperanzas? Yo no te las di nunca, si eran falsas. ¿Fue por venganza? Dime, cuéntame: ¿de que te vengaste? ¿Cual fue el propósito de las mentiras?
Es cierto, nunca sabemos lo que tenemos, hasta que lo hemos perdido. ¿Por que te entregaste de nuevo entonces, si escaparías de mis manos?
Es ahora justo cuando quisiera, cuando necesito, que seas parte de mi y de mi vida; justo cuando quiero que me amaras, me abrazaras, y respirases el perfume que mi piel desprende... Quiero beber de tu aliento y comer de tus labios...
Dime... ¿que ganabas con robarme mis ilusiones?

viernes, 4 de marzo de 2011

Efectos de un adiós.



Siento un escalofrío. Me ha dado por escuchar las canciones mas melancólicas que tengo. ¿Cuanto ha pasado? ¿veinte minutos? ¡Já! Y ya te necesito, quiero decirte "¡Hey! ¡Era broma, te amo!" quiero decirle a todos cuanto te amo, de hecho quiero gritarlo. Tu sigues siendo mi mundo, solo que yo quiero cambiar de planeta. Mi corazón se ha roto, en pedacitos chiquititos, pequeñisimos, microscópicos; no, se ha hecho polvo. ¿como se reconstruye con polvo? Ahora que ya no estas, ni estarás, creo que será siempre de noche para mi. ¿como se vive sin sol? Infidelidad, abrazos, caricias, peleas, gritos, mentiras, besos, placeres... Todo se ha ido a la basura en dos lineas; ¿no te apena? ¿no extrañas todos esos placeres culpables? Odio caer en la cuenta de que hablar contigo esta mal, de saber que es indigno.. Pero en este caso, creo que la dignidad, ni el honor, ni el orgullo tienen nada que hacer, los he perdido, y lo haría una y otra vez, solo por quedarme contigo.

miércoles, 2 de marzo de 2011

La melancolía de mi corazón enamorado.


¡Hola! ¿Cómo has estado? ¿Todo bien? Hace mucho que no sé de tí. Cuéntame, ¿te has enamorado de nuevo?

¿Recuerdas a tu primer amor? No era una chica muy hermosa, pero a tí te encantaba estar con ella. Nunca nadie entendió qué veías en ella. Era muy diferente, y eso te repugnaba un poco, hasta que la viste por cinco segundos y descubriste que sus ojos también brillaban. ¿La recuerdas? Nunca pasaba desapercibida, pero era tímida, y tú eras el único que lo sabía. Ella te amó mucho, todos lo sabían.


¿Recuerdas cuando te fuiste de su vida? ¿Recuerdas esos ojos curiosos rojizos y húmedos de tristeza? Te sonrió, veló por tu felicidad y por dentró se quebró. ¿Ella estará bien ahora?


¿Y aquel primer beso? Ahí descubriste lo frágil y débil que ella era, viste un miedo incesante en sus ojos, y sus mejillas ardían. Sentías cosquillas al ella respirar agitadamente en tu cuello, ¿lo recuerdas? Te pareció lo más tierno del mundo.


La viste ser una niña, una jovencita llena de juventud y optimismo; la viste hacerse tu amante en tus brazos. La viste hacerse tuya, y de ningún otro hombre.


¿Cómo olvidar cuando ella prometió estar ahí a tu lado? Se aferró a tu fotografía, sintiéndote tan triste, tan melancólico, ella quiso protegerte. ¿Y dónde está ella hoy? Aún sigue velando por tu felicidad, aún te ama.


¿Y su mano? ¿Recuerdas que siempre intentaba entrelazarse con la tuya? Como cuando tú entrelazabas tus labios con los de ella. Tú fuiste su primer beso de amor, su primer "te amo". Ella aún se estremece al recordar aquél momento.


Aún te guardo algo de rencor porque la heriste mucho, al irte de esa forma, al darle la espalda y marcharte, pensando que ella estaría bien, y no fue así... ella sigue dependiendo de tí, y sigue soñando con tu recuerdo. ¿Sabes cómo lo sé? Porque lo que a ella le arde, lo mucho que te extraña, y ese rencor que te guarda, yace en mi corazón. Porque ese corazón tan dulce y frágil, esa mirada rojiza y húmeda, esas mejillas ardientes, ese interior quebrado, el recuerdo del primer beso, todo eso... es mío, es lo que hoy me conforma.

lunes, 28 de febrero de 2011

Soy tú.

Fue mi elección. Desde pequeña, supe que te quería en mi vida, porque eras mi destino. Porque en cuanto te vi, sin saber nada de ti, ni tu nombre, me enamore de lo que eres, y no paré de buscar hasta encontrarte y hacerte parte de mi. Porque me liberas, porque no paro de contar cada segundo para verte de nuevo; porque, cuando estoy contigo, me olvido del mundo.
Eres exigente, pero ¡oh! ¡cuanto me das a cambio! Soy lo que soy, gracias a ti. ¡Te amo! ¡eres mi vida! ¡creo en ti, así como tu crees en mi! Mi esfuerzo es todo por ti.
Porque, cuando estoy contigo, me olvido de los problemas, todo parece tonto, cuando me tomas de la mano y mueves mi cuerpo ¡no soy yo, eres tu! Me haces suspirar, me recibes con los brazos abiertos, estas orgulloso de mi. Me amas, lo siento, eres lo primero que pienso al despertar, y al dormir, y al soñar.
Es hermoso saber que estas dentro de mi, porque así esta escrito, y que yo estoy en ti, porque así debe ser.

viernes, 25 de febrero de 2011

Ven, ámame


Hey, olvida todo. Te amo ¿me amas? Mírame, no cuesta nada. ¿Ves el brillo en mis ojos? Ven, dame tu mano, toca aquí. ¿Lo sientes?  ¡es mi corazón! Late tan apresurado, está agitado. Se muere por reencontrarse con el tuyo. ¡Ven acá! ¡Abrazame! Seamos uno solo ¡me haces falta! Necesito saber que me perteneces, que eres mío. Soy egoísta, no quiero compartirte. ¡Basta de rodeos! Seamos felices, como antes. Olvida mis errores, ¿recuerdas mi sonrisa al verte? yo recuerdo la tuya. Recuerdo las cosas buenas. Te necesito. Me siento vacía, hueca, como una tonta concha de playa. ¿Recuerdas nuestros sueños? ¿recuerdas las risas? ¿recuerdas las caricias y las miradas? ¿comprobaste que existe el amor a primera vista? ¡Yo sí! Unas cuantas miradas, un corto dialogo, un pequeño baile... un beso. Otro más. Y, llegado a ese punto, ya no pudimos parar, como si nos conociéramos de toda una existencia... ciertamente, así lo sentí. ¿Qué si estuvimos bajo los efectos del humo y el alcohol? Tal vez...
¿Hacía cuanto no amabas a alguien así? ¿Hace cuanto una mirada enamorada se posó sobre ti?

Es increíblemente tonta la manera en que te dije adiós, fueron estúpidos lapsos de impulsividad, de deseos de libertad, porque no entendía que la libertad estaba dentro de ti, que sin ti no sería feliz... Perdona por no pensar antes de actuar... perdona que te busque de nuevo, ahora cuando me haz olvidado.
Ahora solo quiero mirar al frente, y verte allí, esperándome, para abrazarme, y darte uno de esos besos desesperados, porque mis labios quieren los tuyos, y mis manos quieren tu cuerpo, mi mente te quiere tener presente siempre dentro de mi cabeza, y yo no puedo luchar contra ellos. Hey, ven, que te quiero conmigo.

jueves, 24 de febrero de 2011

Estrella boreal


Te veo sonreír a diario, desde mi ventanal. Te veo recorrer tu habitación, posar tus ojos en la Luna. Me siento enamorada, sé que te estoy amando. La noche se ve hermosa en tus ojos. ¿Qué te hace sonreír así? ¿Qué es lo que hay en tí que no me permite conciliar el sueño? ¿Por qué todo lo que haces me es encantador?

No, no cierres la cortina, no me cierres tu corazón, aún quiero verte ser feliz, aún quiero enamorarme más de tí. Aún quiero descubrir qué te hace feliz. ¿Mañana volverás para enamorarme? ¿Volverás a sonreirle a la Luna?

domingo, 20 de febrero de 2011

Amanecer contigo.


Un arrebato de locura me hizo asentir, me hizo seguir, aun sabiendo que, de cualquier forma, estaba mal. Pero dejó de importarme cuando enredé mis manos a tu pelo, cuando sentí tu boca en mi cuello y mis piernas entre las tuyas; cuando el placer estremeció mi cuerpo y el sol diurno dibujaba tu silueta. Poco me importó, ¿Qué más daba? Si tu mirada profunda me pedía más, ¿Cómo iba a negarme ante eso? Si tu voz segura susurraba en mi oído, y tu respiración pausada daba en algún punto de mi espalda.
No había amanecido despierta nunca antes, mucho menos de aquella forma. Porque aun con los ojos cerrados, sabía que estabas junto a mí, rodeándome con los brazos, no sé si amándome, pero si deseándome, poseyéndome…

Un reencuentro de ensueño.


Un sol radiante que me quita de encima el frío invernal, un sol hermoso que desde el cielo, ilumina mi sonrisa y baña de calor mi emoción. ¡Hoy te veré! Hace tantas primaveras que no pasamos una dulce tarde juntos, ¡no puedo creerlo! ¿Qué tanto habrás cambiado? ¿Tus ojos cafés seguirán brillantes y vivaces? ¿Seguirás teniendo esa manía de lamerte los labios? Ahí estás... puedo verte... eres tú... ¿Puedes verme? ¡Mírame! Desordené mi fleco para tí, y conservé tu último beso en mis labios. Me has visto, y me sonríes... me abrazas, te correspondo, y logro despertar de otro sueño.


sábado, 19 de febrero de 2011

Bienvenido a nuestro país: Loveland

Ah... el amor... El amor es algo de lo más bonito, pero... también puede ser algo muy desagradable. ¿Tú te has enamorado? Yo conozco a dos chicas quienes sí se han enamorado. ¿Quieres conocerlas? ¡Pues adelante! ¡Ah, pero claro! ¿No sabes dónde estás? Bien, mientras conoces a estas dos escritoras amantes de la dulzura de un beso, fanáticas de una caricia a plena luz de luna, servidoras y usuarias del "te amo", ellas te irán guiando por este rinconcito de la web... Esto es Loveland, y ellas son Analy y Elaine.

· A Analy le encanta divagar mientras ve el techo, lo utiliza como proyector de sus ideas y pensamientos, le ayuda a visualizar lo que quiere, lo que tiene, lo que podría hacer y lo que debe hacer.

· Elaine es una excelente bailarina, le encanta sentir su cuerpo en armonía constante con la danza contemporánea, y le gusta como la danza le hace olvidar sus problemas; sin omitir que eso aumenta su atractivo ante los chicos en alguna que otra fiesta.

· Analy es muy sensible, demasiado. Las lágrimas no tardan jamás en acoplarse en sus ojos, y su corazón es tan frágil como dulce. Pero ¿verla llorar? Nadie ha podido verla jamás llorar.

· Elaine es muy variante, es casi regida por la luna, puede ser lunatica, un poco loca e hiperactiva, y otros dias llega a ser demasiado callada e incluso gotica, pero siempre sera friki, rara e inmadura.


¿Algo que le rompa el corazón a Analy? Las desilusiones. Ella suele ser muy risueña, le gusta formar de una pequeña esperanza, toda una cadena de sucesos y sentimientos nuevos en ella, ¿para luego que todo eso se rompa? Es lo que más le duele.

Por todo lo contrario, lo que le rompe el corazón a Elaine es una completa ironia: romperle el corazón a alguien mas en su busqueda de su amor soñado.


¿Acaso quieres una visualización puntual de ellas? Bien, pues...
Esta rara de cabello alborotado es Elaine



Ella... ella sólo es Analy.


Ahora sólo esperamos que residas en Loveland y no partas nunca, a la espera de un nuevo gran amor.